La Granja y sus productos
La granja, fruto del trabajo familiar, se extiende por 4 hectáreas que, exceptuando la planicie de frente a los apartamentos, en gran medida son moldeadas abruptamente, y es principalmente dedicada al cultivo del olivo que se usa para la producción de aceite; hay también un pequeño viñedo, que proporciona vino a los propietarios, a sus amigos y huéspedes, y del mosto se destila una modesta cantidad de grappa.
Numerosos árboles frutales han sido plantados aquí y allá, para permitir una producción en los diferentes períodos del año, de la cual obtener también deliciosas mermeladas.
Las tareas necesarias para el mantenimiento varían de acuerdo a la estación
del año y se llevan a cabo sin perturbar la estancia de los huéspedes,
quienes si lo desean, pueden participar en algunas de ellas, como la
vendimia (finales de septiembre y principios de octubre) o la cosecha
de aceitunas (mediados de octubre/finales de diciembre).
Todos los productos de la granja, destinados en primer lugar al consumo personal, son obtenidos con métodos naturales y sin el empleo de productos químicos (sólo para el cuidado de la viña se utilizan compuestos imprescindibles que contienen cobre y azufre); una parte de la producción, en cantidades a su vez disponibles, puede ser adquirida por los huéspedes, que a su llegada reciben de regalo algunas muestras de cortesía.
El aceite
El aceite de oliva extra virgen es obtenido exclusivamente por presión mecánica en frío, de aceitunas cosechadas a mano en la granja, almacenadas en un medio ambiente adecuado sólo durante el tiempo necesario para alcanzar la cantidad necesaria para la formación de una "pilata" (cantidad que, en el entero proceso, asegura que el aceite producido deriva exclusivamente del proprio olivar, generalmente 250-350 kg), y de ninguna manera sometidas a tratamiento adicional alguno.
La variedad de los árboles existentes (cerca de 800 plantas, divididas en los tipos: Frantoio, Leccino, Moraiolo y Pendolino) ofrecen al producto un sabor aromático, fresco, equilibrado, agradablemente áspero con una vena placentera de almendras.
El vino
Su nombre “Il Pigno” se refiere a la fruta de la cual proviene.
El viñedo es de planta relativamente nueva (edad media 15 años), en hileras con una densidad de 2.000 cepas por hectárea, que yacen en una ladera orientada al sur, con suelos francos y arenosos, que contienen sílice y magnesio.
El vino es el producto de una mezcla solamente de variedades de uvas blancas (Vermentino, Trebbiano, Malvasia di Candia, Malvasia toscana, San Colombano), vinificado con el método tradicional: un proceso que consiste en un despalillado, un envejecimiento del mosto y una fermentación a temperatura ambiente con ajuste por cinco meses, durante los cuales se somete a por lo menos tres "cambios" para separar las heces gradualmente depositadas.
El color resultante es intenso, ámbar, claro, y el aroma es de frutas, profundamente intenso con puntas de melocotón maduro, muy equilibrado en el paladar.
El contenido de alcohol varía según el año, permaneciendo normalmente entre 12 y 13%.
La Grappa
El mosto obtenido de la vinificación sin presionar, es sometido a una única destilación lenta, dando lugar, después de la necesaria eliminación de las fracciones inicial y final, a una grappa de gradación no muy alta, pero que se caracteriza por un aroma y un sabor especiales.
La miel
Las colmenas, que de las dos iniciales hace algunos años, hoy se han
convertido en una decena, gracias a la recuperación de los nuevos enjambres
que se producen en primavera, están situadas aproximadamente a unos 700
metros de la casa de vacaciones, al margen de una arboleda de acacias
y de frente a campos sin cultivar, que en esa temporada se visten de
todos los colores de las flores.
La miel se recoge normalmente dos veces al año:
-la primera a finales de primavera, de color más claro, porque es producida principalmente
cuando florecen las acacias: su sabor es ligero, delicado y recuerda la dulzura
de frutas maduras, no empalagoso; su cristalización es muy tardía, con cristales
grandes y es fácilmente soluble en agua.
-la segunda en verano, que proviene de muchas variedades de flores (llamada por
esta razón "millefiori"), y que conserva las mejores propiedades de
muchos de los néctares de los que se forma. Tiene una textura granulada y el
color es variable en función de la nectarífera de origen. Su sabor es dulce,
afrutado, decidido y fuerte y se cristaliza fácilmente.