Aquella que fue por más de 200 años una granja con establo, granero y bodega, ha sido recientemente completamente restaurada, para ofrecer a nuestros huéspedes una cómoda y relajante estancia, en dos apartamentos de 4 habitaciones completamente independientes, equipados además con un sistema de calefacción para estadías en la temporada más fría.

Cada apartamento ofrece hasta 6 puestos para dormir: 2 en un amplio dormitorio matrimonial, en el cual se puede incluir, en su caso (y suministrarse bajo petición), una cuna para niños; 2 en un dormitorio con dos camas de una plaza y 2, por último, en la sala de estar, donde hay un cómodo sofá-cama, que puede ser fácil y rápidamente transformado.

En la sala de estar, decorada con muebles que recuerdan la tradición toscana, se describen además del sofá, una despensa con escaparate, una mesa ampliable con sus sillas, un televisor con canales vía satélite; en un lado de la sala se ha colocado la cocina, que está equipada con una cocina de gas con 4 hornillas y horno, frigorífico con congelador, lavabo con doble cuenca, además de los muebles que contienen la vajilla y todo lo necesario para la preparación de alimentos.

El cuarto de baño, situado entre los dos dormitorios está equipado con un lavabo, bidet, bañera y ducha. La lavadora de ropa ha sido instalada en un cuarto separado de los apartamentos.
La entrada a cada apartamento se abre a una terraza de unos 15 metros cuadrados, con vista a la parte del edificio que da al mar, la cual está a disposición exclusiva del piso y cubierto con vigas de castaño y ciprés, recuperados de la antigua granja y utilizados en esta zona de la casa. En la terraza podrá encontrar una mesa y sillas, ideales para desayunos y almuerzos al aire libre.


Las verandas tienen vista directamente hacia un jardín casi plano de olivos de unos 5.000 metros cuadrados cercado a lo largo de su perímetro exterior, desde el cual se puede ver completamente la llanura, la ciudad de Viareggio y un largo tramo de costa; desde aquí el panorama se extiende a lo lejos sobre el mar, hasta poder ver, en un día claro, el perfil de la isla de Gorgona, todavía hoy sede de una colonia penal y, más raramente, el de la isla de Capraia y la parte norte de Córcega, lejanas a unas 60 millas marinas; en estas jornadas límpidas, por la parte sur se puede adivinar a lo lejos (20 km) el perfil de la catedral y de la torre inclinada de Pisa; por la noche, además, la costa se muestra con enjambres de luces, que van desde el faro ubicado al norte en la isla de Tino (golfo de La Spezia) hasta el faro en el puerto de Livorno, en el sur.

En medio de los olivos se encuentra (para cada departamento) una mesa con  repisa de mármol y bancos de madera; además, una ducha común de piedra para refrescarse en las horas más calientes  del verano y algunas piletas también de piedra: sin duda todos podrán encontrar su esquina preferida en donde colocar para un placentero relax, las sombrillas y tumbonas suministradas con los apartamentos.

Aquí y allá crecen las adelfas de colores, árboles de cítricos, salvia fragante y setos de romero, madroño, y los geranios y buganvillas que adornan las terrazas. En los momentos de contemplación para quien lo desee, una pequeña gruta con la imagen de Nuestra Señora de Fontenova, reposa a la sombra de los cipreses.

En todo caso, los departamentos son muy acogedores también en el período invernal, cuando se alquilan a precios especiales, dependiendo de la temporada y la duración de la estancia: para obtener más información, póngase en contacto con nosotros.

Habitación matrimonial

Habitación matrimonial

Sala de estar

Sala de estar

El jardÍn

El jardÍn

Plano


Plano

GalerÍa de fotos

Sala de estar y cocina
Sala de estar y cocina

 

Sala de estar
Sala de estar

 

Habitación matrimonial

Habitación matrimonial

 

Dormitorio doble

Dormitorio doble